

Después de meses de cruce de aranceles y acusaciones cruzadas, Estados Unidos y China dieron un paso clave para frenar la guerra comercial que tiene en vilo a medio mundo.
Desde Ginebra, el secretario del Tesoro norteamericano Scott Bessent y el embajador comercial Jamieson Greer anunciaron este domingo “avances sustanciales” en la negociación bilateral, aunque dejaron los detalles para más adelante.
“Cooperación, intereses compartidos y respeto mutuo”: esas fueron las palabras que eligieron los funcionarios para describir el clima de las conversaciones. Un cambio de tono radical si se lo compara con el fuego cruzado de semanas atrás.
Según Greer, la rapidez con la que se alcanzaron ciertos consensos “refleja que las diferencias quizás no eran tan grandes como pensábamos”. Buena señal para los mercados… y para los bolsillos del mundo.
BREAKING: U.S. Announces China Trade Deal in Geneva pic.twitter.com/JjgvYAvAGe
— The White House (@WhiteHouse) May 11, 2025
Aunque no se filtraron números ni medidas concretas, se espera que este lunes EE.UU. publique un informe completo con los puntos clave del acuerdo. ¿El objetivo? Resolver el déficit comercial “masivo” que motivó el conflicto en primer lugar, y que el propio Trump declaró como una “emergencia nacional”.
Sí, el ex presidente también está involucrado: Bessent confirmó que habló con Trump, quien “estuvo completamente informado y respaldó el proceso”.
Recordemos que, hasta hace poco, la relación bilateral estaba al rojo vivo:
🔹 Aranceles de hasta 145% para productos chinos.
🔹 Respuesta china con tarifas del 125% para bienes estadounidenses.
🔹 Prácticamente, un embargo comercial disfrazado.
Porque lo que pase entre estas dos superpotencias impacta directo en la economía global: desde los precios del iPhone hasta la soja que exporta Argentina.
¿Se terminó la guerra comercial? Todavía no. Pero al menos ahora, hay diálogo, café de por medio y menos amenazas.