

Barcelona y Real Madrid chocan este sábado en Sevilla para definir al campeón de la Copa del Rey 2025. Aunque ya no estén Lionel Messi ni Cristiano Ronaldo, la rivalidad sigue tan viva como siempre en el Estadio Olímpico.
El Blaugrana, dirigido por Hansi Flick, sueña con el triplete: lidera La Liga, está en semifinales de Champions y busca su primer título de la temporada. Con 76 puntos en el torneo local, llega entonado para la final.
El Merengue, en cambio, afronta el duelo con más presión. Está cuatro puntos abajo en la Liga y fue eliminado de la Champions por el Arsenal. Esta Copa del Rey es su gran oportunidad de salvar el año.
La historia reciente favorece a Barcelona, que ya goleó dos veces al Madrid esta temporada. El sábado se escribe un nuevo capítulo de esta eterna rivalidad.