El Tribunal de Disciplina de la Asociación del Fútbol Argentino oficializó este jueves la sanción contra el Club Social y Deportivo Madryn, luego de los disturbios que empañaron la final del reducido frente a Estudiantes de Río Cuarto y que forzaron al árbitro Facundo Tello a suspender el encuentro.
Según resolvió la AFA, el club deberá abonar una multa equivalente a 300 entradas generales, lo que representa un monto cercano a $7.200.000. La medida llega tras analizar los hechos producidos en la tribuna del Aurinegro, donde un grupo de hinchas desencadenó incidentes que derivaron en la interrupción del partido.
Desde el organismo remarcaron que este tipo de episodios “atentan contra la integridad del espectáculo deportivo”, motivo por el cual se aplicó la sanción correspondiente.
Mientras tanto, en Madryn esperan conocer si habrá medidas adicionales que afecten la próxima temporada. Por ahora, el golpe económico ya es un hecho y el caso vuelve a encender el debate sobre seguridad y responsabilidad en el fútbol del ascenso.