El caso que conmocionó al país vuelve a sumar capítulos. El gobierno de Chaco solicitó formalmente que los integrantes del clan Sena, condenados por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, sean trasladados a cárceles federales.
La confirmación llegó este miércoles de la mano del ministro de Seguridad provincial, Hugo Matkovich, quien explicó que el pedido ya fue elevado y ahora depende de factores clave. “Hace falta cupo y que se cumplan los perfiles criminológicos que exige el Servicio Penitenciario Federal”, señaló el funcionario.
Mientras se define el posible traslado, César Sena y su padre Emerenciano fueron movidos a un nuevo pabellón dentro del Complejo Penitenciario de Villa Barberán, donde actualmente comparten celda.
La decisión se tomó luego de la fuga de una interna, un hecho que encendió alarmas dentro del sistema carcelario chaqueño y obligó a revisar los protocolos de seguridad.
El sector donde están alojados ahora cuenta con medidas de control reforzadas, está aislado del resto de los detenidos y tiene acceso a un patio interno durante gran parte del día. Por sus características, incluso personal del Servicio Penitenciario lo considera un espacio “VIP”.
Desde el Ministerio de Seguridad aseguraron que el objetivo es reducir riesgos y evitar nuevas fugas, en un contexto de máxima sensibilidad por el impacto público del caso.
En paralelo, la Justicia ya puso día para una definición central. La jueza Dolly Fernández fijó para el 10 de febrero de 2026 la instancia en la que se determinarán las condenas finales para los Sena y los demás implicados.
Durante el juicio, Fiscalía y querella pidieron prisión perpetua, mientras que la defensa cuestionó la constitucionalidad de esa pena.
El pedido de traslado a cárceles federales marca una nueva etapa en una causa que sigue generando repercusión nacional y mantiene a Chaco bajo el foco de atención.