El temporal que golpea este lunes a Comodoro Rivadavia dejó postales de alto impacto y una ciudad en vilo. Con ráfagas que superaron los 150 km/h, distintos sectores sufrieron desprendimientos y daños estructurales que obligaron a activar protocolos de emergencia.
Uno de los episodios más graves se registró en el barrio 30 de Octubre, más conocido como las 1008, donde una ráfaga arrancó por completo el techo de un edificio. Varias familias quedaron expuestas al viento, que sigue siendo intenso y no da tregua.

Vecinos del sector contaron que “el estruendo se escuchó a varios metros”, lo que generó un momento de pánico entre quienes viven en el complejo. Pese a la violencia del desprendimiento, no hubo heridos.
El centro de Comodoro tampoco se salvó del temporal. La sucursal céntrica de La Anónima sufrió la voladura de parte de su estructura, lo que llevó a los directivos a cerrar todas las sucursales por precaución.
Desde la empresa señalaron que la medida apunta a proteger al personal y a los clientes hasta que las condiciones meteorológicas mejoren.
En paralelo, también se registraron daños en Chango Más, donde las ráfagas arrancaron sectores del techo y obligaron a detener la actividad comercial.
Comodoro continúa bajo alerta por vientos extremos y la posibilidad de nuevos desprendimientos. Las autoridades recomiendan evitar la circulación, asegurar objetos sueltos y mantenerse atentos a los comunicados oficiales.
La intensidad del temporal ya dejó en claro su capacidad destructiva y mantiene a toda la ciudad pendiente del cielo.