

El caso que conmociona a Entre Ríos tuvo un giro definitivo: Daiana Magalí Mendieta, la joven de 22 años que estaba desaparecida desde el viernes, fue asesinada de un disparo. Su cuerpo fue encontrado este martes en una zona rural conocida como Los Zorrinos, cerca de la Ruta 12, a pocos kilómetros del lugar donde había aparecido su auto abandonado.
La fiscal Emilce Reynoso, a cargo de la investigación, confirmó los resultados preliminares de la autopsia: Daiana tenía una herida de arma de fuego que le provocó la muerte. Su cuerpo estaba en el fondo de un pozo de unos diez metros de profundidad y vestía la misma ropa con la que había sido vista por última vez.
Desde el viernes a la noche no se sabía nada de ella. La última vez que la vieron fue cuando salió en su Chevrolet Corsa Classic, que la policía encontró el domingo a la madrugada, con las llaves puestas y sin señales de violencia, en un camino rural a 2,5 kilómetros del pueblo.
Las pericias sobre el vehículo quedaron a cargo del personal de Criminalística de Paraná, que busca rastros o huellas que ayuden a reconstruir los últimos movimientos de la víctima.
Con los primeros indicios, la investigación se concentró en un solo sospechoso: un hombre de 55 años apodado “Pino”, con quien Daiana habría tenido contacto poco antes de desaparecer.
El lunes, por orden de la jueza Silvina Cabrera y la fiscal Reynoso, se realizó un allanamiento en un galpón alquilado por el sospechoso, donde la policía encontró armas de fuego y teléfonos celulares. “Pino” intentó resistirse armado, pero fue detenido y permanece bajo custodia mientras se analiza su posible vínculo con la víctima.
El jefe de Policía de Tala, Pedro Silva, aclaró que el acusado “no es familiar ni alguien del entorno cercano” de Daiana. La Justicia trabaja ahora para determinar si existía una relación previa entre ambos.
Durante cuatro días, el caso movilizó a toda la comunidad. Participaron bomberos, perros rastreadores, drones y equipos especiales de varias departamentales, que rastrillaron caminos, campos y zonas rurales.
El intendente de Gobernador Mansilla, Francisco Pasinatto, expresó la conmoción del pueblo: “Nunca nos pasó algo así. Hay mucha tristeza, angustia y una comunidad entera esperando justicia por Daiana”.
La causa quedó caratulada como femicidio agravado por el uso de arma de fuego, y la fiscalía no descarta nuevos procedimientos en las próximas horas.