

Una lancha rápida sospechada de transportar drogas fue destruida este viernes por fuerzas de Estados Unidos en aguas internacionales, frente a las costas de Venezuela. El ataque, ordenado por Donald Trump, dejó cuatro presuntos narcotraficantes muertos y ningún herido entre las tropas norteamericanas.
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, confirmó que se trató del cuarto operativo en pocas semanas, elevando a 21 la cifra de fallecidos en estas acciones militares. En un mensaje publicado en redes sociales, explicó que la embarcación era parte de una ruta conocida del narcotráfico y estaba cargada con “importantes cantidades de drogas”.
Earlier this morning, on President Trump's orders, I directed a lethal, kinetic strike on a narco-trafficking vessel affiliated with Designated Terrorist Organizations in the USSOUTHCOM area of responsibility. Four male narco-terrorists aboard the vessel were killed in the… pic.twitter.com/QpNPljFcGn
— Secretary of War Pete Hegseth (@SecWar) October 3, 2025
El propio Trump celebró el resultado y aseguró que la lancha llevaba suficiente droga como para “matar entre 25.000 y 50.000 personas”.
El video difundido por el Pentágono muestra la persecución de la lancha, seguida de una explosión que la envuelve en humo y fuego, hasta quedar consumida por las llamas.
Este nuevo ataque ocurre un día después de que Trump declarara a los cárteles de la droga como “combatientes ilegales”, formalizando lo que definió como un “conflicto armado no internacional” contra esas organizaciones.
Con ocho buques de guerra y más de 5.000 efectivos desplegados en el Caribe, Estados Unidos mantiene una fuerte presencia militar en la región. Según fuentes del Departamento de Defensa, al menos tres de los blancos atacados recientemente tenían origen venezolano.