

El Gobierno busca con esta medida incentivar las inversiones en moneda local y, de esta manera, contener la presión sobre el dólar . En la última licitación de deuda, el Tesoro convalidó una tasa anualizada de casi el 70% para las letras capitalizables a un mes. Este costo es más del triple de la inflación esperada para los próximos 12 meses, que se ubica en el 21,1%, según el Banco Central.
Expertos del mercado, como Gustavo Araujo , jefe de Investigación de Criteria, advierten que estos niveles de tasas no son sostenibles a largo plazo . Se espera que el Gobierno mantenga la "jugada fuerte" hasta los comicios de octubre y que, una vez superada la prueba electoral, el escenario se estabilice con tasas más razonables. Algunos analistas alertan que el alto costo de la renovación de la deuda podría generar un desahorro que afecte negativamente los números fiscales a mediano plazo.