

Tras cinco años de batalla judicial, el veredicto del Tribunal en lo Penal N° 1 de Zárate-Campana puso fin al juicio. Aunque no estuvo presente durante la lectura del veredicto, Julieta Prandi se emocionó profundamente al enterarse de la noticia, rompiendo en llanto al llegar a los Tribunales para reencontrarse con sus familiares. El médico del tribunal tuvo que asistirla, pero confirmó que su estado era estable, describiéndolo como un "problema emocional más que otra cosa" y destacando que estaba "contenta por la condena". La modelo había sufrido una descompensación en la audiencia anterior, pero en esta ocasión se encontraba acompañada y asistida.