

El sujeto, que se encontraba en un estado de nerviosismo evidente, había ingresado al comercio para retirar un teléfono que había dejado para reparar, pero se negó a pagar una deuda de $80.000 por el arreglo. Al serle negado el dispositivo, el delincuente tomó otro celular que no era de su propiedad e intentó huir.
Según información de las autoridades, el hombre comenzó a manifestar amenazas cuando el personal del local se negó a entregarle el celular sin el pago correspondiente. Posteriormente, se dirigió detrás del mostrador, tomó un teléfono Motorola G8 de color azul y trató de escapar. Sin embargo, el damnificado logró demorarlo hasta la llegada de la policía de la Seccional Primera, que procedió a su detención.