

Sin embargo, el Gobierno de Javier Milei ha anticipado públicamente que vetará ambas iniciativas. La reacción oficial de La Libertad Avanza en redes sociales fue contundente: “El superávit fiscal no se negocia”, un mensaje que el propio presidente replicó.
La decisión del veto sigue la misma línea del rechazo presidencial a los aumentos de jubilaciones y a los fondos para discapacidad. En una jornada legislativa compleja para el oficialismo, la oposición logró el quórum necesario para aprobar los proyectos. Además de estas leyes, la oposición rechazó cinco decretos del presidente que buscaban disolver o reestructurar organismos estatales clave como Vialidad Nacional, el INTA y el INTI. Aunque estos decretos aún no están anulados, ya que requieren el rechazo del Senado, la votación en Diputados representa un golpe político para el plan de ajuste del Gobierno.
En este contexto de confrontación, el Gobierno también se está enfocando en la negociación con los gobernadores para evitar que se trate en el recinto la redistribución de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y del impuesto a los combustibles líquidos. El oficialismo logró dividir a los legisladores provinciales, y algunos ya acordaron postergar el tratamiento del proyecto de combustibles para el próximo miércoles, a la espera de un posible acuerdo de porcentaje de coparticipación.