

Newell’s Old Boys sancionó a seis niños de 9 años luego de que se viralizara una foto de ellos junto a Ignacio Malcorra, jugador de Rosario Central. La imagen fue tomada en un encuentro informal en Funes, donde juega el hijo del futbolista. El club les suspendió la beca deportiva y los entrenamientos.
Desde la institución hablaron de “respeto al escudo” y afirmaron que la medida fue “ejemplificadora”. El coordinador del predio rojinegro, Carlos Panciroli, defendió la decisión al señalar que “no podemos permitir que se repitan estos errores”. Sin embargo, padres de los chicos niegan haber acordado la sanción.
El caso generó fuertes repercusiones en Rosario y medios nacionales. Algunos adultos respaldaron al club, mientras que otros cuestionaron la falta de diálogo y el exceso de fanatismo en un ámbito que debería priorizar la formación.
Desde la Escuela Malvinas Argentinas, donde ocurrió el hecho, Juan Álvarez intentó calmar las aguas, aclarando que no fue una sanción formal sino un entrenamiento suspendido en medio de amenazas cruzadas. La polémica vuelve a poner en debate los límites del fanatismo en el fútbol infantil.