La dependencia creciente a teléfonos inteligentes ha expuesto a los usuarios a una mayor cantidad de amenazas cibernéticas que pueden comprometer la privacidad de información sensible, hasta contraseñas de redes sociales o cuentas bancarias.
Los ciberataques no discriminan, y una mala práctica puede abrir la puerta a que terceros maliciosos se apoderen de datos personales, contraseñas o incluso roben grandes sumas de dinero, sin dejar ningún rastro .
Para evitar ser una víctima más, es fundamental conocer las prácticas que bajo ninguna circunstancia se deberían realizar desde el celular, para reducir el riesgo de ataque y pérdida de recursos digitales y económicos.
Cuáles aplicaciones nunca hay que descargar en el teléfono
Uno de los errores más comunes es la descarga de aplicaciones desde tiendas no oficiales o fuentes desconocidas. Aunque puede ser tentador instalar esa aplicación que no está disponible en Google Play Store o en la App Store, el peligro que conlleva es considerable.
Estas aplicaciones, en muchos casos, han sido desarrolladas sin controles de seguridad rigurosos y pueden estar infectadas con malware o troyanos diseñados para robar información personal.
Este tipo de software malicioso puede actuar de diversas maneras: desde el robo de contraseñas hasta la instalación de programas espía que monitorean tu actividad. Peor aún, algunas maliciosas pueden comprometer la seguridad de todo el dispositivo, dejando abiertas puertas traseras que permiten a los ciberdelincuentes acceder de manera remota.
Para proteger el teléfono, lo ideal es instalar únicamente aplicaciones desde tiendas verificadas, porque estas plataformas cuentan con mecanismos de seguridad más robustos.
Por qué son peligrosas las aplicaciones gratuitas
Es común encontrarse con aplicaciones que ofrecen atractivos servicios de manera gratuita, como juegos, editores de fotos o herramientas de productividad. No obstante, muchas veces estas, aunque aparentemente inofensivas, pueden representar un alto riesgo para la seguridad del celular. El truco está en los permisos que solicitan.
Es fácil pasar por alto los permisos al instalar una aplicación, pero esta es una de las principales maneras en las que se filtra información sensible. Surgen dudas sobre, si realmente necesita una aplicación de linterna acceder a contactos o al micrófono. La respuesta es no.
Sin embargo, algunas aplicaciones abusan de los permisos, recopilando datos innecesarios que podrían ser vendidos a terceros o utilizados para crear perfiles detallados sobre tu comportamiento en línea.
Por lo tanto, es importante que antes de instalar cualquier aplicación, leer atentamente los permisos que solicita y preguntarse si son realmente necesarios para su funcionamiento. De ser posible, busca alternativas que requieran menos acceso a tus datos personales.
Qué enlaces nunca oprimir desde el celular
El phishing, una de las formas más comunes de ciberataques, es una técnica utilizada para engañar a los usuarios y hacerles revelar información confidencial como contraseñas, o números de tarjetas de crédito.
Los delincuentes suelen enviar mensajes de texto, correos electrónicos o mensajes en redes sociales, que incluyen enlaces maliciosos. Un clic en uno de estos enlaces puede ser suficiente para comprometer todo el dispositivo.
Los sitios web maliciosos a los que redirigen estos enlaces están diseñados para parecer legítimos, y una vez que ingresas tu información, esta va directamente a manos de los delincuentes. Además, algunos de estos enlaces pueden iniciar descargas automáticas de software dañino que se instala sin que se noten.
Para evitar caer en estas trampas, es fundamental nunca dar clic en enlaces que provengan de fuentes no verificadas o que parezcan sospechosos. Ante un mensaje inesperado de un banco, un servicio de suscripción o una red social, verificar directamente en la aplicación oficial o en el sitio web antes de interactuar con el enlace.
Cómo proteger el teléfono de amenazas
Un sistema operativo o una aplicación desactualizada es una puerta abierta a los ataques. Los ciberdelincuentes suelen aprovechar las vulnerabilidades en versiones antiguas del software para infectar dispositivos.
Por esta razón, mantener tanto el sistema operativo como las aplicaciones actualizadas es una medida crucial para la seguridad. Las actualizaciones no solo añaden nuevas funcionalidades, sino que también corrigen fallos de seguridad que podrían ser explotados por atacantes.
Además, contar con un software antivirus confiable y realizar copias de seguridad de manera regular permitirá mantener tus datos seguros y minimizar los riesgos en caso de que algo salga mal.