La Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (Cadam) salió al cruce del ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, que reclamó a los empresarios que “nunca más” le pidan al Gobierno bajar impuestos. “Bajar impuestos no significa recaudar menos, porque si se vende más, se recauda igual”, advirtió.
También reclamó que “las que no pueden sostener la balanza son las empresas, con aumentos de costos y caída de ventas”. “Necesitamos la motosierra de aportes obligatorios inexplicables”, completó la gremial empresaria supermercadista.
El sector pide que se elimine el IVA para productos alimenticios de primera necesidad que forman parte de la canasta básica, para fomentar el consumo, aumentar las ventas y la recaudación, y de esa manera compensar la reducción de impuestos.
Además, asegura que “eliminar aportes obligatorios innecesarios para que haya mayor producción y trabajo” permitirá sostener el equilibrio fiscal.
Que dijo Sturzenegger a empresarios que provocó la respuesta de los supermercadistas
Sturzenegger expuso en la última jornada del 60° Coloquio de IDEA y les exigió a los empresarios que dejen de pedirle al Gobierno que baje impuestos. También anunció que comenzará una etapa de “deep motosierra” en las distintas áreas del Ejecutivo y adelantó nuevas desregulaciones en el transporte de carga.
“Cuando interactúen con el Gobierno, nunca más nos pidan bajar impuestos. Si nos piden bajar impuestos, y el gasto se mantiene igual, ese impuesto que bajo a alguien se lo tengo que cobrar a otro”, le pidió Sturzenegger a los empresarios en IDEA.
Y agregó: “Ustedes nos tienen que pedir que bajemos el gasto, porque cada gasto que bajamos es un impuesto que cobramos de menor manera. Destierren pedir bajar impuestos que es un privilegio para un sector”.
“Bajar impuestos no significa recaudar menos, porque si se vende más, se recauda igual” insistió Cadam.
No obstante, coincidieron en “respaldar la flexibilización de las jornadas laborales y fijar un único criterio para pagar los juicios laborales”, pero pidieron la “motosierra de contribuciones obligatorias inexplicables como el INACAP, que no representa un beneficio porque ningún empleado se capacita todos los meses o no lo hizo nunca, pero el empleador lo debe aportar igual desde el año 2008 por cada trabajador registrado, que en el convenio mercantil son 1,2 millones (la paritaria más grande del país)”.
“En septiembre y octubre la contribución patronal incluso aumentó a $4.278,10, cuando el ministro había anticipado que estudiaba que sea optativo. Queremos mayor producción y trabajo y para eso, hay que recortar este tipo de aportes, de los cuales no hay una rendición de cuentas pública, para entender qué hacen con los más de $60.000 millones que se recaudarían por año”, indicó la cámara, que reclamó “que se incluya en la motosierra profunda”.