La Justicia peruana condenó este lunes a 20 años y seis meses de prisión al expresidente Alejandro Toledo después de considerarlo culpable de recibir millonarios sobornos de la constructora brasileña Odebrecht a cambio de obras en su gobierno.
”Este colegiado asume el pedido hecho por la fiscalía de prisión para el señor Alejandro Toledo Manrique”, anunció la Corte Superior en una audiencia en la que estuvo presente el exmandatario de 78 años.
Toledo, quien está enfermo de cáncer, gobernó Perú entre 2001 y 2006. La semana pasada, le había pedido a los jueces que lo dejen curarse o morir en su casa.
Es el segundo exmandatario peruano condenado por corrupción después de que el recientemente fallecido Alberto Fujimori (1990-2000) recibiera en 2009 tres sentencias por ese delito, aparte de otra como autor mediato de 25 asesinatos. Otros tres expresidentes son investigados por la justicia.
De qué se acusó al expresidente Alejandro Toledo
La justicia encontró culpable a Toledo por colusión y lavado de activos. En concreto, se lo acusó de recibir dinero de la constructora brasileña Odebrecht a cambio de adjudicar la construcción de un tramo de la carretera que conectó Brasil con Perú.
La jueza que leyó la sentencia consideró a Toledo como el cargo más alto involucrado y que se cumplieron los supuestos de culpabilidad por ambos delitos. Además, le impuso tres años de inhabilitación para ejercer cargo público, como pidió la fiscalía.
La fiscalía acusó al expresidente de recibir 35 millones de dólares de Odebrecht a cambio de adjudicar a la constructora brasileña -señalada por casos similares en varios países de América Latina- una licitación pública para construir 650 kilómetros de la llamada carretera Interoceánica que une Brasil con el sur de Perú.
Esa parte de la carretera costaba al inicio 507 millones de dólares, pero Perú terminó pagando 1255 millones de dólares. Toledo, que niega las acusaciones, cumple prisión preventiva desde abril de 2023.
El expresidente le pidió a los jueces, en una audiencia realizada el miércoles de la semana pasada, que lo dejaran regresar a su casa porque estaba enfermo. Con la voz quebrada y las manos juntas, como si estuviera rezando, aseguró que tenía cáncer, problemas en el corazón y le faltaba poco para cumplir 80 años. “Les pido por favor, déjenme curar o morir en mi casa”, indicó.
Los otros expresidentes peruanos con causas en la justicia
Toledo está en prisión preventiva desde que fue extraditado desde Estados Unidos hacia una cárcel capitalina para expresidentes. Fue arrestado en 2019 por el pedido de la justicia peruana. En esa misma cárcel está preso el expresidente Pedro Castillo (2021-2022), mientras es investigado por el presunto delito de corrupción y rebelión.
Junto a Toledo, otros dos expresidentes están investigados o enjuiciados por sus presuntos nexos con Odebrecht. Ollanta Humala (2011-2016) enfrenta un juicio en el que la fiscalía solicitó 20 años de cárcel por lavado de activos y Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018) está investigado por colusión, con la prohibición de salir del país, además de tener embargada parte de su pensión como expresidente.
El caso más trágico fue el del expresidente Alan García (2006-2011), quien se suicidó en 2019 en su dormitorio minutos antes de que la policía entrara a detenerlo de forma preliminar por 10 días para ser investigado por presuntamente haber recibido un soborno de la compañía brasileña.
Las investigaciones contra la clase política peruana empezaron después de que Odebrecht admitiera en 2016 ante las autoridades de Estados Unidos que había sobornado a funcionarios importantes en varios países de América Latina, incluido Perú, para obtener ventajosos contratos de infraestructura.
Con información de las agencias AFP y AP.