”En este nuevo Chaco pretendemos que haya un control social, porque no hay nada que esconder”, aseguraba el gobernador Leandro Zdero el miércoles 14 de marzo en el Jaime Zapata al presentar el programa Ñachec, una esquema que -según él- terminaría para siempre con los intermediarios políticos entre el Estado y la necesidad.
Tres doritos después…
EsChaco pudo acceder a fotografías y testimonios de ciudadanos de Misión Nueva Pompeya que denunciaron cómo el Ñachec en esa ciudad del Chaco es manejado a piacere por familiares de Marcos Resico, actual secretario de Asuntos Estratégicos del gobierno de Zdero.
En los últimos días circularon en redes sociales y se viralizaron en WhatsApp fotografías de camionetas de las que descargaron colchones y otra mercadería en una vivienda de Pompeya. La casa, nada más y nada menos, pertenecería a la madre de Javier Torrez, el cuñado del funcionario.
Silvana Carolina Resico, hermana del secretario de Zdero, es la secretaria del Juzgado de Paz de la localidad. También ella tendría injerencia en el reparto de alimentos y otros bienes que son adquiridos por el Estado.
“Ñachec será el programa de la libertad, donde la gente pueda desarrollarse libremente en el lugar donde está y también, de recuperar la dignidad”, había dicho Zdero hace apenas siete meses.
Lo cierto es que a este caso puntual en Pompeya se suman otros miramientos sobre la injerencia de intermediarios del oficialismo en el manejo de la mercadería que es comprada con fondos públicos.
Quejas de las comunidades originarias en Machagai
Alberto Barreto, reconocido dirigente indígena de Machagai, se expresó días atrás en redes sociales respecto al programa Ñachec. “La famosa oficina que se supone que brinda ayuda acá en nuestro pueblo es mentira”, escribió.
“Y no solamente nos miente a los indígenas sino que también usan nuestro lenguaje como una pantalla”, criticó. El dirigente social expresó su rechazo al manejo social del gobierno y profundizó sus cuestionamientos. “Esto está muy mal”, consideró.
“Nos mienten: nos robaron nuestro lenguaje”, agregó. “Cuando uno entra en esa oficina no hay ningún indígena, adentro están todos los hijos de los gringos, todos acomodados, sentados al pedo cobrando un sueldo”.
Barreto también apuntó contra la denominación que Zdero le dio al programa social: Ñachec significa «gracias» en lengua qom.“¿Por qué tengo que darles las gracias si ellos no nos dan nada?”, se preguntó. “Capaz que en realidad son ellos que nos agradecen por haberles dado el voto y ahora nos dejaron en pelotas”, acotó. “Todo esto nos genera bronca porque siguen mintiendo; a mí me prometieron ayuda en el merendero que tenemos y seguimos esperando”, criticó.
El dirigente indígena volvió a cuestionar la política social del gobierno y desterró la idea de que ya no hay intermediarios.
“Es la peor mentira; esta es la mala manipulación porque es la política sucia; están usando nuestro lenguaje como pantalla”, finalizó.
eschaco