Este viernes se cumple el quinto día consecutivo de bloqueos en Bolivia. Seguidores del ex presidente Evo Morales realizan piquetes en carreteras que conectan Cochabamba con las principales ciudades del país en defensa del líder cocalero que está acorralado por juicios y acusaciones, y que puede enfrentar una orden de aprehensión por una investigación de trata de personas y estupro.
El viernes en la mañana se registraban 11 puntos de bloqueo por protestas sociales en ese departamento, según el mapa de transitabilidad de la Administradora Boliviana de Carreteras; y cientos de conductores varados, que piden al Gobierno y a la Policía intervenir los piquetes para permitir el tránsito.
Desde que comenzó la protesta, el lunes 14 de octubre, suman 570 camiones cisterna que están varados en el camino, un hecho que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) calificó como un “atentado” al abastecimiento de combustible.
La gerente de Productos Derivados e Industrializados de YPFB, Gabriela Delgadillo, indicó la medida de presión está “entorpeciendo y perjudicando de manera contundente la logística de distribución” de gasolina y diésel.
Frente a esa situación, pidió a los movilizados liberar las vías para dejar pasar las cisternas que contienen cerca de 16 millones de litros de combustible y otras que vacías deben regresar a las plantas para garantizar el flujo a la población. “Definitivamente, esto es un atentado al abastecimiento del país. No es bueno que sigan bloqueando, (por eso) pedimos que, por favor, puedan retirar los bloqueos”, insistió Delgadillo en declaraciones recogidas por el periódico tarijeño El País.
La medida de presión también ha interrumpido el abastecimiento de combustible en el bastión de Morales, la región cocalera del Chapare. El Comando Regional de la Policía en la localidad de Villa Tunari informó que sus vehículos patrulleros están parados porque no tienen gasolina para poder movilizarse y atender las emergencias.
Vehículos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) y otras unidades policiales se encuentran fuera de operaciones ante la falta de distribución de combustible a los surtidores de la región.
En tanto suman los daños para los transportistas y la población en general, las organizaciones sociales afines a Evo Morales condicionan el diálogo con el Gobierno. Por un lado piden que se libere a su líder político de los procesos judiciales que enfrenta y que se valide un congreso parcial del Movimiento Al Socialismo que lo ratificó como jefe del partido y lo proclamó candidato para las elecciones 2025. Sin embargo, estas determinaciones no son competencia del Órgano Ejecutivo sino del judicial y el electoral, respectivamente.
Por otro lado, insisten en la derogación de una serie de decretos. Entre ellos uno que prohíbe la compra y venta de combustible en bidones y el que prohíbe todo tipo de quemas, debido a la catástrofe ambiental que atraviesa el país debido a los más de cuatro meses de incendios que han arrasado 10,1 millones de hectáreas.
De igual forma, desde el evismo han presentado una serie de demandas sindicales vinculadas a la crisis económica y exigen que se resuelva la escasez de dólares y el desabastecimiento periódico de combustible.
Enfrentamiento con la Policía
Según medios de comunicación locales, la noche del jueves hubo intervención policial en uno de los piquetes instalados en la carretera hacia Santa Cruz, que derivó en enfrentamientos y la retención de dos policías, uno de los cuales resultó herido. El reporte policial señala que al lugar llegaron 180 uniformados, pero fueron rebasados por alrededor de 500 personas, por lo que se replegaron a una localidad cercana.