La localidad bonaerense de San Pedro permanece en alerta luego de que miles de vecinos realizaran una denuncia por una presunta estafa piramidal millonaria ligada a las criptomonedas. En el medio de las acusaciones, además, aparecieron dos ciudadanos polacos, que se presentaron en un comienzo como dos directivos de la supuesta empresa de trading, pero que en realidad son actores de series y películas.
Se trata de Maurycy Lyczko y Filip Walcerz, quienes a fines de septiembre se presentaron en un hotel de avenida Libertador y durante un evento dijeron que eran los ejecutivos de la empresa. Allí indicaron que se llamaban Timothy Murphy y Jeremy Jones, aunque no son sus verdaderas identidades.
Walcerz tiene un perfil profesional en la agencia The Harterallen. Allí dice que tiene 44 años, vive en Inglaterra y nació en Varsovia, la capital de Polonia. Su compañero, Maurycy Lyczko, tiene 38 años y también es de esa ciudad, aunque alterna su residencia con Londres y Madrid, de acuerdo al sitio Film Makers.
A través de la web de IMDb, que es el sitio que nuclea la totalidad de las informaciones sobre cine y ficciones en general, aparece el largo recorrido de las dos figuras polacas en series y películas. Mientras que Lyczko hizo 39 trabajos, Walcerz tiene 32.
El trabajo más conocido que hizo Lyczko es la serie española La zona, de 2017, en la que participó de dos episodios. En el caso de Walcerz, además de actor es músico, y lo más relevante en lo que intervino fue en el film Bad Boy.
Cómo sigue la investigación de la presunta estafa con criptomonedas
El equipo de TN está en San Pedro y habló con los damnificados, que habrían confiado en un una firma de trading: es un sistema que consiste en comprar una moneda virtual que paga entre un 1% y un 2% más en tan solo un día. Ese rendimiento, que ninguno otro ofrecía, lo volvía exitoso.
Rainbowex era promocionada por “Knight Consortium”, una fundación conformada por un grupo de accionistas que supuestamente operan en el mercado de valores y captam inversores minoristas en todo el mundo. Sin embargo, la firma no está registrada y no tienen ningún aval legal, ni siquiera un sustento jurídico.
En San Pedro ya son más de 12 mil las personas que están asociadas a esta criptomoneda, un gran porcentaje para una ciudad con menos de 70 mil habitantes. Si bien todo empezó con el “boca en boca”, el grupo Knight tiene promotores en la ciudad, que incitan a los vecinos a poner su dinero en la plataforma.
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A su vez, esas personas deben reclutar a nuevos participantes, un mecanismo clásico en las estafas piramidales más conocidas bajo el esquema Ponzi.