El ex presidente de Estados Unidos y precandidato republicano Donald Trump aplaudió este miércoles el “gran trabajo” de la Policía de Nueva York en el desalojo de los manifestantes propalestinos que habían acampado en la Universidad de Columbia.
Durante un mítin en Waukesha (Wisconsin), el magnate neoyorquino dijo que “Nueva York estaba bajo asalto” por parte de los estudiantes que denunciaban la política estadounidense de apoyo a Israel ante la guerra de Gaza.
“La policía llegó y en dos horas todo había acabado. Fue precioso de ver, lo mejor de Nueva York”, expresó el republicano entre aplausos del público. . “Los vieron subir en escaleras, rompiendo las ventanas y entrando y eso es peligroso… Lo derribaron y estuvieron increíbles”.
Trump dijo que pensaba que la reputación de la Universidad de Columbia había sido “gravemente dañada”, criticando al presidente de la casa de estudios, Nemat Shafik.
“La persona que la dirige, una mujer, esperó tanto, fue tan débil, tuvo tanto miedo, fue tan mala”, dijo Trump. La acusó de “haber esperado mucho” para actuar, pero finalmente la policía “hizo un trabajo increíble” al entrar en el edificio que había sido ocupado por varios estudiantes.
Las autoridades irrumpieron la noche del martes en el emblemático edificio Hamilton Hall (Universidad de Columbia), que horas antes había sido tomado por los estudiantes propalestinos.
El operativo de desalojo en el recinto, que también fue ocupado en 1968 en protesta contra la guerra de Vietnam, tuvo un saldo de 282 manifestantes detenidos, según informó este miércoles el alcalde de Nueva York, Eric Adams.
Nemat Shafik se dirigió a la comunidad universitaria en una carta hecha pública el miércoles, después del desalojo policial, señalando que la “drástica escalada” de las protestas de meses “llevó a la Universidad al borde del abismo.”
La desinversión en corporaciones vinculadas a la acción bélica de Israel en la Franja de Gaza, es un reclamo generalizado que ha movilizado a los universitarios a través del país donde las protestas se han expandido rápidamente.
Durante la madrugada de este miércoles, la Policía de Los Ángeles también intervino en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) para frenar los enfrentamientos violentos entre grupos de manifestantes proisraelíes y los que reclaman parar la guerra en Gaza.
Tras esos enfrentamientos, la UCLA ha cancelado este miércoles todas sus clases.
Campaña en dos estados clave
El mitín de Trump en Wisconsin fue parte de un día de campaña del candidato republicano que incluyó Michigan. Son dos estados clave que Trump espera arrebatar el próximo noviembre a su rival, el presidente demócrata Joe Biden, aprovechando una pausa en su juicio de Nueva York.
Sus comparecencias coincidieron con la entrada en vigor en Florida de una ley que restringe el aborto a las seis semanas de gestación, cuando muchas mujeres todavía no están embarazadas. Trump se atribuyó el mérito de que el Tribunal Supremo, con tres de sus nueve jueces nombrados por él, tumbara en 2022 la sentencia que protegía el aborto a nivel federal y defendió que cada estado debe tener su propia legislación.
Según los últimos sondeos, Trump lidera la intención de voto a nivel nacional, pero el sistema de Colegio Electoral que se utiliza para elegir al presidente hace que algunos estados indecisos sean clave para inclinar la balanza.
La región del Cinturón del Óxido, de la que forman parte Wisconsin y Míchigan, es una zona industrial clave, dado que Trump arrasó allí en 2016 pero Biden logró darle la vuelta en 2020.
Biden tiene el apoyo electoral del poderoso sindicato del motor UAW, muy influyente en la zona, y Trump no desaprovechó la oportunidad para advertir de que si el actual presidente es reelegido todos los vehículos de Estados Unidos acabarán siendo “fabricados en China”.