El economista Daniel Artana dijo hoy que no le parece bien que el presidente y sus funcionarios más importantes les digan a las empresas lo que tienen que hacer con los precios.
Artana, economista jefe de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL) y miembro del equipo económico que durante la campaña electoral encabezó Carlos Melconian acompañando la candidatura de Patricia Bullrich, sin embargo, fue optimista acerca de que la economía tocará fondo en este trimestre e iniciará una recuperación, aunque no esté claro si será fuerte, en forma de V, o más suave, como una “Pipa de Nike”.
Además, advirtió sobre los riesgos de atraso cambiario y aunque relativizó el enojo de Javier Milei con sus colegas economistas, dijo que le preocupan cuando el presidente trata de “ensobrados” a los periodistas sin aportar pruebas, algo que -consideró- “tiene un tinte antidemocrático”.
Entrevistado en el programa “Sábado tempranísimo”, por radio Mitre, Artana señaló que sería muy positivo que a partir de la próxima semana avancen algunas de los proyectos de reforma del Ejecutivo.
“Ojalá se aprueben las leyes, para probar que algunas iniciativas de reforma no son una idea aislada del presidente y su grupo de colaboradores. Que hay varias fuerzas políticas que están de acuerdo con varias reformas. Es muy importante, sobre todo, aun en versión acotada, las leyes laborales. Está el tema de las multas en caso de despido, con el agravante de la litigiosidad, y va a ser importante para las pymes y para que los trabajadores tengan una compensación justa en caso de ser despedidos. Que no sea un negocio de abogados laboralistas”, señaló.
Inflación a la baja
Artana fue bastante optimista sobre la velocidad a la que está cayendo la tasa de inflación, pero cauto acerca de la fuerza que tendría una eventual recuperación de la economía, que en su discurso del miércoles en la Fundación Libertad, el presidente afirmó -escatológicamente- que subiría “como pedo de buzo”.
“La inflación está cediendo. Nuestras proyecciones no son tan optimistas como las que dice el gobierno, pero creo que mayo va quebrar el escalón del 8 por ciento”
“La inflación está cediendo. Nuestras proyecciones no son tan optimistas como las que dice el gobierno, pero creo que mayo va quebrar el escalón del 8% y es muy probable que como dice el presidente la inflación termine el año en el 5% (mensual). Con apretón monetario y fiscal, sin desborde salarial, es difícil que la inflación pueda caminar a niveles de dos dígitos”, explicó.
La forma del rebote
En cambio, fue más cauto sobre el nivel de actividad económica. “Mi impresión es que la economía va a rebotar, pero es más difícil predecir la fuerza de la recuperación. De acá para adelante hay algunas cosas que van a ayudar en el margen a la recuperación, como la recuperación del sector agrícola que será menos de lo que se esperaba, pero será importante, y están los buenos datos de la actividad petrolera y minera”.
En cuanto al nivel de consumo interno, señaló que el cambio de fórmula previsional que se aprobó por el DNU “significa una recuperación modesta de lo que perdieron los jubilados en 2023 y en lo que va de 2024; no discuto si (la reforma) está bien o está mal, pero comparado con las jubilaciones que se pagaron ahora es una mejora. Y la propia dinámica de paritarias también te lleva a que haya alguna recuperación de salarios reales, que han caída mucho porque la economía se sobre-ajustó. Si la recuperación será en forma de V corta o de Pipa de Nike es mucho más difícil de predecir”.
Otro elemento a favor del “rebote”, apuntó es la caída del riesgo-país. Cuando eso ocurre, normalmente los argentinos que tenían ahorros en bonos y en acciones están más ricos y eso los lleva a gastar un poco más. Así que yo creo que hay varios elementos que pueden llevar a que la economía toque fondo en algún momento de este segundo trimestre y a partir de ahí inicie una recuperación”, ponderó.
En cambio, Artana tomó distancia de las observaciones del propio presidente, el ministro Caputo y el diputado libertario José Luis Espert, de que las empresas deberían bajar los precios y que el dólar no se va mover demasiado de su actual valor, en torno de mil pesos.
Riesgo cambiario
“Yo lo llevo a otra discusión: si me preguntás dónde hay algunos riesgos, que pueden pasar factura después, uno es que el tipo de cambio real (esto es, el poder adquisitivo del dólar en el mercado interno) se atrase. Discrepo con la lectura del presidente de que porque la brecha cambiaria es baja no hay problemas. El mercado cambiario está todavía lleno de distorsiones: la liquidación del 20% por el dólar CCL, pagos de importaciones que no son normales, porque se patearon hacia adelante. Y hay que seguir acumulando reservas, porque hay pagos importantes que hacer, como uno al FMI en próximos días. Si atrasás el tipo de cambio es más difícil acumular reservas. En la Argentina hemos tenido salidas traumáticos de atrasos cambiarios. Y tampoco me parece bien que el presidente y sus funcionarios más importantes les digan a las empresas lo que tienen que hacer con los precios. Si hay problemas de competencia que lo tome Defensa de la Competencia”.
Por último, Artana relativizó el enojo y burlas del presidente con otros economistas, incluso con aquellos que tienen coincidencias con él acerca de las reformas económicas necesarias. “Mientras el debate se haga con respeto, no me parece mal. Pero el presidente tiene que mirar las críticas y ver si puede sacar de ellas algo que pueda servir. Me preocupa más cuando revolea a un periodista que está ensobrado y no pone pruebas; eso tiene un tinte antidemocrático.
En cuanto a la “sostenibilidad” del ajuste fiscal, Artana se situó a mitad de camino. “Ha habido críticas de que es pura licuadora y que es efímero. Tampoco creo como dijo el presidente que que es todo motosierra. La verdad está en el medio. Hay cosas que son transitorias que no se pagaron, en particular a las generadoras eléctricas. Va a haber un bono y eso no está bien. Pero en adelante, como va a haber aumento de tarifas, las distribuidoras van a tener capacidad de pagar. En jubilaciones ha habido una baja tremenda, pero el gobierno cambió la fórmula y las va a dar vuelta un poquito. Desde el punto de vista fiscal, si la fórmula del DNU sobrevive el examen visto judicial, habrá un ahorro permanente. No es todo licuadora. Ha habido licuadora que se convierte en motosierra”