Vladimir Putin prometió el sábado “castigar” a los responsables del atentado que dejó la víspera al menos 133 muertos en Moscú, y aseguró que los sospechosos fueron detenidos cuando huían a Ucrania. En ningún momento mencionó la reivindicación del grupo yihadista Estado Islámico, difundida el viernes por la noche y reiterada este sábado.
Más temprano, el Kremlin anunció que detuvieron a once personas, entre ellas “los cuatro terroristas directamente implicados en el atentado”, que ocurrió antes de un recital del grupo de rock ruso Piknik.
El presidente ruso dijo en un discurso televisado que los cuatro atacantes fueron detenidos cuando “se dirigían a Ucrania, donde según los datos preliminares [de los investigadores] se había preparado una ‘ventana’ para que pudieran cruzar la frontera”.
Las cuatro personas fueron detenidas en la región de Briansk, en la frontera con Ucrania y Bielorrusia, precisó el Comité de Investigación ruso, competente en este tipo de crímenes. Tenían previsto cruzar la frontera al país vecino, donde “tenían contactos”, reportó la agencia noticiosa estatal Tass, que cita al Servicio Federal de Seguridad (FSB).
El Ministerio del Interior de Rusia dijo que los cuatro presuntos atacantes son todos ciudadanos extranjeros. Según los medios rusos, al menos cinco detenidos son ciudadanos de Tayikistán, un país centroasiático de mayoría musulmana que formó parte de la Unión Soviética.
La editora de la televisión estatal rusa Margarita Simonyan publicó un video de uno de los sospechosos, un joven barbudo, siendo interrogado al borde de una ruta, en el que el hombre dijo haber sido pagado para cometer el ataque.
En otro clip, se ve el interrgoatorio de otro sospechoso con las manos atadas a la espalda. El hombre dijo que voló desde Turquía el 4 de marzo y recibió instrucciones de desconocidos a través de Telegram para llevar a cabo el atentado a cambio de dinero.
Según las fuentes de los medios Shot y Baza, los cinco sospechosos identificados son Muhammadsobir Fayzov (de 19 años), Shokhinjonn Safolzoda (21 años), Rustam Nazarov (29 años), Majmadrasul Nasridinov (37 años) y Rivozhidin Ismonov (51 años). Estaban registrados como residentes en las regiones rusas de Yaroslavl, Ivánovo y Samara.
ISIS reivindicó el atentado y Ucrania desmintió las acusaciones rusas
El grupo yihadista Estado Islámico (EI o ISIS, por sus siglas en inglés), que Rusia combate en Siria y que está activo en el Cáucaso ruso, asumió el viernes la autoría del atentado y precisó que su comando había regresado “sano y salvo a su base”.
“El ataque fue conducido por cuatro combatientes del EI, armados de ametralladoras, una pistola, cuchillos y bombas incendiarias”, afirmó la organización yihadista en una de sus cuentas de Telegram, y añadió que el ataque se inscribe en el contexto de “la guerra” con “los países que combaten al islam”.
El asesor presidencial ucraniano Mijaílo Podoliak desmintió la acusación de Rusia y escribió en la red social X que “las versiones de los servicios especiales rusos sobre Ucrania son absolutamente insostenibles y absurdas”.
Un funcionario de inteligencia de Estados Unidos dijo a The Associated Press que las agencias estadounidenses habían confirmado que el grupo extremista era el responsable del ataque. Además, indicó que en las últimas semanas, las agencias de inteligencia del país recabaron información que apuntaba que la filial de EI estaba planeando un ataque en Moscú y que, a principios de mes, funcionarios de Estados Unidos compartieron en privado la información con funcionarios rusos.
Ya hay más de cien muertos por el atentado en Moscú
El balance de muertos subió el sábado a 115 muertos, aunque “se espera que aumente”, según el Comité de Investigación ruso. El Ministerio de Situaciones de Emergencias informó por su lado que un centenar de personas siguen hospitalizadas.
Cómo fue el atentado en una sala de conciertos de Moscú
Videos publicados en internet mostraban a hombres armados en el interior del recinto que disparaban a civiles a quemarropa, en un ataque que recuerda al de la sala Bataclan en París.
El techo del teatro se derrumbó en la madrugada del sábado luego de que los bomberos pasaron horas luchando contra un incendio que comenzó durante el asalto.
Según los primeros elementos de la investigación, las personas murieron por “heridas de bala” y por inhalar humo del incendio que estalló tras el tiroteo, indicó el Comité.
Los atacantes, precisaron los investigadores, usaron “armas automáticas” e incendiaron el edificio con un “líquido inflamable”.
Las imágenes compartidas por los medios estatales rusos el sábado mostraron a una flota de vehículos de emergencias todavía en el exterior de las ruinas del Crocus City Hall, un centro comercial y sala de conciertos con capacidad para más de 6.000 personas ubicado en Krasnogorsk, en el extremo occidental del la capital, Moscú.
El atentado se produjo apenas unos días después de que Putin consolidó su control del país con una aplastante victoria electoral. Fue el ataque más letal registrado en Rusia en años y ocurrió mientras la guerra del país en Ucrania entró en su tercer año.